El alto precio de la carne, que ronda los 8 dólares en algunos cortes, tiene a una gran parte de los yaracuyanos lejos de su consumo, pues el presupuesto del trabajador no es suficiente para adquirir la proteína. Algunos buscan diferentes alternativas para alimentarse como pollo, huevo y cortes económicos, mientras que otros optan por carne molida que pueden rendir con otros alimentos.