No hay que pedir tiempo cuando tanto nos ha dado, de 15 a 30 años son los momentos dorados, se puede soñar a lo grande y se anda menos preocupado.
De 40 en adelante llega lo más delicado, dolores por todas partes que nunca se habían presentado, para el deber de trabajar nos sentimos agotados, todo se refleja en quien no se haya cuidado, si uno mismo no se cuida más fuerte será castigado por la inclemencia del tiempo que a cada quien le ha tocado, tiempo que se va no vuelve, dijo un poeta afamado.
Por eso le traje esto, y que quede bien grabado, es un consejo de amigo, ya que tanto Dios me ha dado, y les vuelvo a repetir esto que en mi ha brotado, dejemos quietecito al tiempo, hay algo muy recordado, inclinarnos más a Dios y a sus consejos sagrados, respetar de verdad al prójimo, como él ha recomendado, ponerle freno a la lengua, que es la reina del pecado, por culpa de esa sin hueso, muchos se han enfrentado en momentos de locura, la vida a otro han segado, uno para el cementerio y el otro 20 años arrestado.
El Padre recomienda a todos que vivamos hermanados, no como perros y gatos en un mundo que es de todos como Cristo ha señalado, quien se convierta en verdugo le tocará ser quemado, como un perro mal oliente en un callejón abombado, vaya mi cordial saludo para dos mil amigos que en las redes he conquistado.
En la calle me preguntan, que pasó con las Lorenzadas, que te tienen rezagado en el Diario Yaracuy al Día, un sitial me lo he ganado, muchas gracias para todos al ver como a tanta gente mis crónicas les ha gustado.
Voy a continuar en otro orden como contenido con la correspondiente disculpa, ya que se trata de un tema donde lo que quiero plasmar es algo de mi propia historia, probando mi propio disco duro mental, y no es para exhibir con pretensión de ser alguien muy importante en la vida, ya que la importancia del ser humano está es en la humildad y su sencillez, siempre en todo momento, dejándonos guiar por nuestro Padre del cielo, Dios Todopoderoso, amén.
Entre los años 1968 y 1973 tuve la suerte de encontrar en la ciudad de Caracas a un joven para la época de nombre Juan Galea, un arpista con fama internacional, quien a su vez acompañaba a todos los cantantes de la música criolla, como conjunto de planta de Venevisión, gracias a él vinieron mis primeras grabaciones, y también pude participar como concursante en el Show del Pueblo, animado por Gilberto Correa, a quien le envío un saludo, desde mi digno estado Yaracuy. Otro saludo para “El Puma” José Luis Rodríguez, con el deseo de que ambos gocen de buena lucidez como Juan Galea.
Estando “El Puma” recién casado con Lila Morillo, tenían un espacio donde presentaban a concursantes, y el programa se llamaba Pedestal de la Fama con José Hernández y su hermano Richard Herd por CVTV, yo participé con un tema de Pablo Sanoja (+) el cual se llama Labores campesinas, dicho tema le encantó a la señora Lila y me dijo que se lo dejara grabado para interpretarlo en una novela donde ella estaba trabajando.
Me llevaron a su apartamento en un vehículo lujoso, grabamos el tema y me llevaron al terminal del Nuevo Circo, lógicamente ellos en el asiento delantero y yo en mis adentros decía, una pelusa, si me vieran en San Felipe como un ministro y “El Puma “como mi chofer. Nota: Juan Galea, José Luis, Gilberto, Julio Iglesias y este servidor somos ochentones, la música depara larga vida. Fin.
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