Douglas Rico, director nacional del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (CICPC), informó a través de sus redes sociales recientemente que fue esclarecido el homicidio del taxista Alexis Quintero, hecho ocurrido en el estado Lara en el que está involucrado un yaritagüeño, quien se encuentra detenido por un doble homicidio perpetrado el mismo día.
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Rico señala que a través de un minucioso trabajo criminalístico realizado por la delegación estadal del estado Lara, delegación municipal de Barquisimeto y la Coordinación de Investigaciones de Homicidios de Lara, pudieron esclarecer el homicidio del taxista de 56 años, ocurrido en el kilómetro 12, vía Río Claro, sector Bello Monte del municipio Irribarren, del estado Lara el pasado 5 de diciembre.
Informó que las pesquisas técnico científicas demostraron que el sujeto, de 24 años, quien se encuentra detenido por el doble homicidio de los yaritagüeños Neisber Alfredo Soto Vargas, de 41 años, y Héctor José Medina Colmenárez, de 49 años, ocurrido el 5 de diciembre en la Avenida Circunvalación Norte, sentido este- oeste, parroquia Unión, fue quien ejecutó el crimen del taxista horas antes.
Indicó que el sujeto había planificado el robo de Soto y Medina, y requería de un vehículo. Fue así como horas antes, habría sometido al taxista para despojarlo de su carro. El conductor se resistió al robo, por lo que el sujeto le disparó, lo dejó tirado en el sitio y huyó. Luego contacta a los dos hombres para hacerles el acompañamiento, pero en el camino el vehículo le presentó un desperfecto y los llama nuevamente para que lo busquen, en el camino los asesina a ambos y les roba unas divisas. Ambos se trasladaban en una camioneta Toyota 4Runner.
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Los análisis de balística que realizaron al revólver Taurus calibre 38, los exámenes dactiloscópicos, así como la reconstrucción del recorrido realizado por el sujeto, fueron realizados rigurosamente por los expertos criminalísticos, lo que permitió demostrar que el victimario habría acabado con la vida del taxista, para consumar posteriormente el robo y doble homicidio de los yaritagüeños.
Como evidencias, los investigadores ubicaron el celular del taxista y recuperaron su vehículo, un Chevrolet Aveo.
