La noche de este miércoles 29 de octubre Rusia atacó con aproximadamente 650 drones y más de 50 misiles a diversas regiones ucranianas, todo esto en un nuevo bombardeo masivo, en el que perdieron la vida al menos dos personas y tuvo entre sus principales objetivos el sistema energético ucraniano, así lo informó en su cuenta de X el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski.
El portal de Unión Radio, informa que las regiones atacadas fueron Vínitsia y Cherkasi (centro-oeste), Poltava y Dnipró (centro-este), Ivano-Frankivsk y Leópolis (oeste), Sumi (noreste), Kiev (norte) y Mikoláyiv (sur), según Zelenski.
Las autoridades regionales y locales han informado, además, de cortes de electricidad y agua en algunas zonas de estas regiones.
La empresa privada ucraniana DTEK ha informado de daños sustanciales en algunas de sus centrales térmicas. La empresa opera actualmente cinco centrales térmicas en Ucrania.
Zelenski calificó el ataque ruso de terrorismo y pidió una vez más a la comunidad internacional y en especial a EE.UU., Europa y el resto de integrantes del G7 que respondan con «sanciones y presión real» hacia Rusia.
La primera ministra ucraniana, Yulia Sviridenko, pidió además a los socios de Kiev que doten a Ucrania de más sistemas de defensa aérea para que el país pueda proteger sus infraestructuras de los misiles y drones rusos.




