La instalación petrolera es una de las más grandes de Rusia y produce más de 350.000 barriles de crudo al día
Los drones ucranianos atacaron una de las refinerías de petróleo más grandes de Rusia durante la noche del sábado y el domingo, causando explosiones y provocando un incendio, según funcionarios militares ucranianos y rusos.
El ataque tuvo como objetivo la refinería Kirishi, en la región de Leningrado, al noroeste de Rusia, y es el último de una serie de ataques ucranianos contra la infraestructura petrolera rusa, que según Kiev alimenta la invasión a gran escala de Ucrania por parte del Kremlin.
La instalación, operada por el gigante petrolero ruso Surgutneftegas, produce cerca de 18 millones de toneladas métricas de petróleo crudo por año y es una de las tres principales instalaciones de Rusia por producción.
Según el Estado Mayor de Ucrania, se reportaron explosiones e incendio en la refinería de Kirishi. Publicó una foto que parecía mostrar un incendio y nubes de humo contra el cielo nocturno.
El gobernador de Leningrado, Alexander Drozdenko, declaró que tres drones fueron derribados sobre la zona de Kirishi y que el incendio fue causado por la caída de escombros. Drozdenko señaló que no hubo civiles heridos ni muertos en los ataques, y añadió que el incendio también fue extinguido.
El ataque también ocurre apenas un día después de que el presidente estadounidense, Donald Trump, reiterara sus advertencias anteriores sobre graves repercusiones para los países que sigan comprando petróleo ruso.
El sábado, Trump advirtió a los aliados de la OTAN de Washington con aranceles que oscilan entre el 50 y el 100 por ciento si dichas compras no se detienen.
