El presidente de la Cámara Inmobiliaria de Venezuela Roberto Orta aseguró que en la actualidad, el mercado inmobiliario en el país se divide en 51% de arrendamientos y otro 49% en ventas, aunque en el pasado siempre se sobre puso la venta por encima del mercado de alquiler, reseñó Unión Radio.
Explicó que en el segundo trimestre de este año el sector presentó una reducción de inmuebles, motivado por el contexto político electoral que «tradicionalmente trae cierta expectativa y las personas esperan los resultados para hacer negociaciones».
«Toda la situación de conflictividad política trae cierta lentitud en las decisiones de compra de bienes inmuebles en Venezuela», aseguró.
La Cámara Inmobiliaria de Venezuela estimó que esta disminución de ventas y alquileres se prologue por la misma expectativa y el panorama política al que se enfrenta el país.
La reforma de 20 artículos de la Ley de Arrendamientos de Viviendas es una de las propuestas llevadas ante la Asamblea Nacional para «una oferta masiva de viviendas en alquiler y aprovechar los inmuebles que están desocupados debido a la diáspora venezolana y beneficiar no solo a los propietarios que están fuera del país, sino a jóvenes profesionales y condominios donde hay altas tasas de morosidad».
Además, la Ley del Deudor Hipotecario es una segunda propuesta que supone la fomentación del financiamiento de viviendas, a través de la banca y en moneda extranjera.
Roberto Orta destacó la tercera propuesta legislativa de regulación para el sector, que corresponde a la Ley contra la Estafa Inmobiliaria, que en la actualidad restringe la ganancia de un promotor inmobiliario en un proyecto privado.
