En una perenne cacería por gasolina a precio internacional están muchos conductores, o por lo menos los del área metropolitana, quienes aseguran que la distribución sigue siendo insuficiente para toda la población, más aún los fines de semana. Actualmente muchos se están apoyando de los diversos grupos de WhatsApp, en los que detallan cuándo y dónde están llegando las gandolas. Otros prefieren preguntarle a un amigo o consultarlo directamente en las estaciones de servicio, bien sea en persona o por redes sociales. Cada quien aplica lo que más le favorece.
Lo cierto del caso es que la distribución sigue fallando, los conductores deben primero averiguar dónde están despachando y luego hacer su respectiva cola, una más larga que la otra.
Esta espera es la que a muchos les molesta, y más aún si queda por fuera, ya que tiende a acabarse en pocas horas. “Estuve media hora en una cola y cuando iba a llegar nos dijeron que se acabó, la gente se comenzó a quejar y decidieron medir el tanque, y al ver que quedaba un poco más metieron a otro lote, pero muchos no llegaron”, esto le pasó a un conductor de San Felipe este fin de semana.
“Llegar tranquilamente a una bomba y surtir sin tanto problema parece una misión imposible en este país, siempre hay un problema, una cola”, dijo otro de los consultados.
Varios conductores dijeron que la situación se complica los fines de semana, ya que algunas estaciones de servicio no laboran y otras, aunque le llega despacho, prefieren vender a partir del lunes.
“Quienes no podemos surtir en la semana porque estamos trabajando, tampoco lo podemos hacer los sábados, ya que no llega, se acaba rápido o las colas son interminables”, dijo otro de los afectados.
