Antes de enamorarse del blues y antes de empezar a escribir canciones, los pequeños Mick Jagger y Keith Richards montaban juntos en triciclos. “No recuerdo cuando lo conocí. Vivíamos a una calle de distancia; su madre conocía a la mía y fuimos juntos a la escuela primaria de los 7 a los 11… No éramos muy amigos, pero sí manteníamos una amistad”, (Mick Jagger, Revista Rolling Stone, 1995).
Estas futuras estrellas del rock crecieron en Dartford, al este del gran Londres. Cuando la familia Richards se mudó a otro barrio, Jagger y Richards asistieron a escuelas separadas y se vieron menos. En esa etapa de la adolescencia, ambos jóvenes experimentaron un gusto especial por el rock and roll y el blues. De hecho, Jagger formó su propia banda con otros jovencitos de entre 15 y 16 años de su misma localidad.
Al concluir su etapa de secundaria, el estudioso Jagger asistía a la London School of Economics (su padre quería que él fuera economista, un hombre de la administración y de los negocios). Por su parte, el despreocupado Richards asistía a la SidCup Art School, en donde empezó a tomar clases de guitarra. Pronto, sus caminos se cruzarían para dar el big bang de una de las bandas de rock más legendarias de todos los tiempos.
La mañana del 17 de octubre de 1961, Mick Jagger (18), llegó al andén 2 de la estación del tren de Dartford para trasladarse a la universidad donde estudiaba Economía. Poco después, Keith Richards (17) se presentó en este mismo andén para ir a su clase de guitarra. Jagger portaba unos discos en su mano y Richards su guitarra eléctrica hofner. De inmediato entablaron conversación (ambos ya se conocían desde sus días como estudiantes de la escuela primaria Wentworth).
Ya a bordo del tren, los viejos amigos de primaria continuaron su charla, especialmente sobre la colección de discos de blues y rythm and blues que Jagger poseía. “Él llevaba dos álbumes: ‘Rockin’ at The Hops’ de Chuck Berry y ‘The Best of Muddy Waters’. Hasta entonces solo había oído hablar de Muddy” (Keith Richards – “The Unauthorised Biography”, 1992). Para sorpresa de Richards, Jagger tenía una suscripción personal con Chess Records (de Estados Unidos) desde donde adquiría aquellas joyas del blues y rock and roll.
Ese mismo día de aquella amena y memorable conversación, y con ganas de escuchar aquellos LP, Richards invitó a Jagger a tomar el té de esa tarde. Tras esa sesión de escucha, el joven cantante le pidió al guitarrista aficionado unirse a su banda Little Boy Blue and The Blue Boys, que interpretaba canciones de Eddie Chrocane, Buddy Holly y Chuck Berry. Así, entusiasmados por sus gustos musicales, ambos jóvenes forjaron una prometedora iniciación artística actuando en clubes y fiestas particulares de aquel Londres de comienzos de los 60.
El 7 de abril de 1962, Jagger y Richards conocieron en el Ealing Club de Londres a un talentoso bajista llamado Brian Jones. Este último de inmediato les pidió que se unieran a su banda Blues Incorporated, la cual ampliarían con tres miembros más al siguiente mes.
Finalmente, el 12 de julio de 1962, harían su debut en el Marquee Club, pero esta vez llamándose The Rolling Stones: Mick Jagger (voz líder), Keith Richards y Brian Jones (guitarras), Dick Taylor (bajo), Ian Stewart (teclados) y Mick Avory (batería), comenzaba así una gran leyenda.
Transcurridas seis décadas de buen blues y rock, The Rolling Stones han logrado vender más de 250 millones de discos alrededor del mundo. Según Celebrity Net Worth, Mick Jagger (82) y Keith Richards (81) poseen por separado una fortuna que asciende a los 600 millones de dólares. Actualmente figuran como los únicos miembros fundadores activos de esta gran agrupación, considerada por muchos como la más longeva y exitosa en toda la historia del rock.
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