La interrupción del servicio eléctrico en la entidad yaracuyana generó en muchas personas ansiedad, incertidumbre y estrés, y es que muchos comentaron que revivieron el momento del apagón en marzo de 2019, y de solo pensar en esa situación temen que suceda lo mismo.
«Han pasado muchas horas y es preocupante porque así fue esa vez y fueron varios días de angustia que no quisiéramos revivir «, dijo Dayana Lugo.
En una reconocida red de farmacias de la localidad, específicamente en Independencia, donde disponen generadores de corriente, se acercaron varias personas con el propósito de cargar sus celulares e, incluso, algunos dijeron que fueron con el objetivo de revisar las redes para estar informados de la situación, pero también para “despejar” la mente y distraerse.
«Necesitaba salir de casa porque si no colapsaba, así veo gente mientras cargo mi equipo y a la vez veo otro ambiente», dijo uno de los consultados.
Al recorrer varios lugares y comercios, algunos ciudadanos se mostraron nerviosos haciendo compras antes que cerraran los negocios, sobre todo comida no perecedera, alegando que prefieren prevenir ante cualquier otra situación que pueda presentarse.
«Hace días también ocurrió un apagón y aunque fue menos, con este de hoy #30agosto hay que estar muy atentos porque nunca se sabe si viene otro o cuándo realmente restablezcan el servicio por eso prefiero comprar algo de alimentos que se mantengan sin refrigeración», comentó Hilda Flores.
Ante este panorama que se vive a nivel nacional, psicólogos hacen un llamado a mantener la calma y la cordura ante todo, así como seguir una serie de recomendaciones de diferentes expertos en salud mental ante casos de ansiedad y angustia, entre ellos, tener una red de apoyo de amigos y familiares, tratar de ocuparse en otras cosas, no desesperarse, pedir la colaboración a quienes tienen planta para cargar los equipos móviles u otros artefactos, evitar estar solos, hacer ejercicios de respiración, entre otras acciones
