La mañana de este domingo 7 de diciembre fue encontrado sin vida Juan Inocencio Alejos Rivas, de 71 años, en su residencia, ubicada en la calle 8 del sector Las Tinajas, en el municipio San Felipe.
El cadáver lo encontró una de sus nietas, el cuerpo estaba en la cama de su habitación con un rastro de sangre a la altura del pie y piso, además de una extensión de electricidad.
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Alejos era pastor evangélico, acostumbraba a predicar en su tierra natal, Aroa, municipio Bolívar, y con frecuencia viajaba hasta su residencia en San Felipe, donde vivía solo.
Desde el sábado en la mañana nadie sabía de él, incluso, otros compañeros de la iglesia contaron que tenían horas llamándolo, pero no pudieron establecer comunicación, hasta que la mañana de este domingo recibieron la noticia de su fallecimiento.
Funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (CICPC) están indagando la causa de muerte, los primeros indicios muestras que aparentemente sufrió una descarga eléctrica. Alejos era un hombre sano, sin patologías, sin embargo, todo está en proceso de averiguación.
El Servicio Nacional de Medicinas y Ciencias Forenses (Senamecf) hizo el levantamiento del cuerpo y lo trasladó hasta la sede para realizar los exámenes correspondientes en este tipo de casos.
Familias y vecinos estaban consternados por el suceso, aseguraron que el pastor era muy querido y respetado.
