El papa León XIV reiteró este sábado su llamado a que la Iglesia sea una comunidad misionera que construya puentes y reciba con los brazos abiertos a quienes necesitan de su presencia y amor. Durante un encuentro con los funcionarios de la Curia Romana, empleados de la Santa Sede, la Gobernación y el Vicariato de Roma, el Pontífice enfatizó la importancia de promover el diálogo y la caridad en todas las acciones.
Lea también: Líderes mundiales y al menos 200.000 feligreses presenciaron la misa que marcó el inicio del papado de León XIV
“Juntos, debemos buscar maneras de ser una Iglesia misionera, una Iglesia que tiende puentes y fomenta el diálogo, siempre abierta a acoger… con los brazos abiertos, a todos aquellos que necesitan nuestra caridad, nuestra presencia, nuestra disposición al diálogo y nuestro amor”, expresó León XIV. Recordó además el saludo que pronunció el 8 de mayo desde el balcón de la Basílica de San Pedro, dirigido inicialmente a la Iglesia en Roma, pero ahora extendido a toda la misión universal.
El papa subrayó que esta misión consiste en servir a la comunión, a la unidad en la caridad y en la verdad, siguiendo el ejemplo de Cristo, quien encomendó esta tarea a Pedro y sus sucesores. Invitó a todos los presentes a colaborar con compromiso y fe en su labor diaria, resaltando que “la fe y la oración son como la sal de la comida; dan sabor”. Finalmente, agradeció a los trabajadores del Vaticano y miembros de la Curia por su dedicación y servicio constante.
Lea también: León XIV promete seguir su compromiso misionero en su primera misa como papa
