Este domingo #13Abr el Real Madrid logró una victoria importante y ajustada por 1-0 frente al Deportivo Alavés en un partido intenso y caótico, que sigue manteniendo al equipo en la lucha por la Liga. Este triunfo, cada vez más necesario, llega justo antes de un crucial enfrentamiento contra el Arsenal en la UEFA Champions League.
Aunque el juego no fue uno de los mejores del equipo blanco, el gol de Eduardo Camavinga, un centrocampista que brilló en medio del desorden, marcó la diferencia.
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Desde el principio, el partido se tornó complicado para el Madrid. Las visitas al norte de España suelen ser desafiantes, y esta no fue la excepción. El Alavés, con el apoyo de una afición ruidosa y apasionada, buscó desestabilizar al conjunto merengue. Sin embargo, a pesar de la presión y del ambiente hostil, el equipo dirigido por Carlo Ancelotti encontró la forma de mantenerse en el juego.
Eduardo Camavinga se convirtió en el héroe de la tarde. Cuando el encuentro se volvió un polvorín, el joven francés mostró su calidad al recuperar balones, interrumpir ataques rivales y, lo más crucial, al darle al Madrid la ventaja con un excelente disparo en el primer tiempo. Su gol no solo significó tres puntos, sino también un aliento de esperanza en un campeonato que presenta cada vez más desafíos.
El partido tuvo otros momentos de tensión, incluida la tarjeta roja a Kylian Mbappé, que dejó al Madrid con un jugador menos por un período significativo del encuentro. Afortunadamente, la situación se equilibró cuando Manu Sánchez vio la roja, lo que permitió a los merengues recuperar cierta estabilidad en el juego. Sin embargo, el ambiente no era solo caótico en el campo; las gradas también fueron testigos de cánticos de odio dirigidos al árbitro Raúl Asencio. La Liga debe actuar ante esta situación inaceptable, que va más allá del deporte.
Ancelotti, consciente de la importancia de mantener fresco a su equipo, alineó un once sin Jude Bellingham ni Vinícius Júnior. Ambos jugadores son fundamentales para las aspiraciones del Madrid en la Champions League, lo que subraya la importancia que el entrenador les otorga al pensar en el gran choque contra el Arsenal. Con esta victoria en Vitoria, el equipo se mantiene a solo cuatro puntos del Barcelona, lo que mantiene viva la esperanza en la Liga.
El Real Madrid ahora deberá usar esta energía acumulada de su victoria en Vitoria para enfrentar al Arsenal el próximo miércoles. Con la Liga aún en la carrera y la Champions League a la vista, los merengues deben aprovechar cualquier momento de lucidez y calidad individual que pueda marcar la diferencia en sus próximas batallas.
Con información de Meridiano
