Estos apellidos se encuentran en la caja fuerte de mi chirimoya regional, nacional e internacionalmente, y algunos son: Andrade, Angulo, Agudelo, Agüero, Almeida, Arroyo, Bolívar, Bastidas, Bellorin, Bello, Blanco, Bermúdez, Bracho, Bortones, Benavides, Baralt, Bencomo, Bonfedak, Bracovite, Belisario, Boulton, Bolaño, Curiel, Cuicas, Cordero, Coronel, Crespo, Contreras, Colina, Caravelli, Cacciopo, Durán, Delfín, Daboin, Dudamel, Diurich, Dorante y Echeverría.
Asimismo, Eulacio, Víez, Escobar, Juárez, Jauregui, Jaramillo, Giraldo, Hernández, Henríquez, Hurtado, Hinojosa, Garcés, Galíndez, Godoy, Galarraga, Gorrín, Gallardo, Guillén, Guaicaipuro, Galván, Virgüez, Benavides, Vizquel, Véliz, Vielma, Vásquez, Visconti, Vaquero, Valero, Timaure, Troconis, Talavera, Tablante, Nadal, Narváez, Naranjo, Navea, Nieves, Morales, Mármol, Mijares, Malavé y Mujica.
De igual manera, Maldonado, Monsalve, Morillo, Mijares, Monasterio, Melo, Meleán, Mogollón, Oropeza, Olivares, Ollarves, Orellana, Olavarría, Obregón, Olivier, Osuna, Oñate, Ocando, Otero, Palencia, Pietri, Polanco, Palavecino, Pantoja, Palacio, Pedroza, Piña, Puche, Pulido, Pernalete, Pernía, Perdomo, Rabán, Romero, Rizutti, Ravell, Rebolledo, Rivero, Riera, Rumbos, Ruiz, Restrepo, Ricaurte, Rondón, Real, Rangel, Rubio, Rivas, Roldán, Rincón, Radamés, Reinoso, Zabaleta, Inojosa e Iturbe, y con esto termino; señores, si no aparece su apellido es porque el sueño me ha rendido. Espero sea de su agrado este humilde contenido, gracias.
En otro orden de ideas, comienzo como debe ser, y vaya un saludo cordial para todos en general, de un servidor y amigo nativo de Tartagal, millonario en glóbulos rojos y blancos, y desde mi fecha natal humilde, limpio y cacharro, a punto de un día volar cual bolsa de esas de plástico cuando un fuerte ventarrón las hace remontar.
Con unos miles de amigos, difícil para contar, y que conocen de mi historia, tratando de mejorar, es la clave más perfecta que nos puede asegurar que, con montones de amigos en el globo, todos podemos alcanzar, no permitir que las amistades por tonterías se lleguen a eliminar. Me disculpo, cortésmente, si en algo llego a faltar por el hecho de ser humano; cualquier error puede llegar y, con una disculpa a tiempo, todo se puede enmendar.
Con la fe en Dios y una conducta sana, mucho se puede lograr. Llegué a ochenta y pico años, celebrando entre familiares y amigos, que nadie me llegó a golpear, testigo mi padre del cielo, que con nadie llegué a pelear, gracias a Dios y a unos buenos padres, que nos supieron formar, con la misma fe cristiana, que no debemos olvidar, que toda confrontación nada bueno va a brindar; al contrario, en muchos casos se malogra cualquier hogar. La pelea es para los gallos y los que aprenden a boxear, practicándolo como un deporte en el mundo muy popular.
Esta es una reflexión que hoy les quise plasmar; no hay como vivir en paz, así sea bajo la pobreza; nuestro Dios nos va a cuidar porque es triste cuando dos elementos se llegan a malograr, uno para el camposanto y el otro lo llevan a encerrar con muchos años de prisión, con el riesgo de que al salir, por venganza, también le den papita, maní y tostón; como decía un narrador de grata recordación, hasta aquí esta Lorenzada en lo que fue mi opinión; deseo que sirva de algo para la reflexión.
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