Familias venezolanas siguen viviendo días de tormenta desde el #29julio, #30julio y #31julio del presente año, fechas en que sus hijos, esposos y hermanos fueron arrestados ante el conflicto postelectoral que se vivía en el país.
Esta situación dejó como resultado una cantidad enorme de detenidos a escala nacional, algunos pudieron ser excarcelados hace unas cuantas semanas, lote en el que no quedó seleccionado Yaracuy.
Aún hay 33 yaracuyanos tras las rejas por la misma situación postelectoral, 27 de ellos se encuentran en la cárcel de Tocorón, ubicada en el estado Aragua, cinco adolescentes en el Centro de Coordinación Policial Juan José de Maya (San Felipe) y una mujer en el comando de la GNB Nirgua.
Por todos ellos familiares, después de cuatro meses, siguen insistiendo en exigir la excarcelación al considerar que son personas inocentes, padres de familia, estudiantes y deportistas.
Vigilias, pancartazos y cadenas de oración han sido algunas de las medidas que han tomado los parientes de los 33 privados de libertad para alzar su voz de manera pacífica y ser escuchados por autoridades de los órganos de justicia en el país.
En el caso de los 27 que se encuentran en Tocorón, familiares se han pronunciado a las afueras del penal para pedir respuesta o dialogar con el director del recinto, sin embargo, alegan que no han tenido buena respuesta.
Agregan que algunos de los yaracuyanos presos en el recinto por situación postelectoral tienen desnutrición, otros presentan dificultad en su estado de salud y varios están deprimidos, tal como es el caso del joven con condición especial que se encuentra allí.
Para los adolescentes la situación es prácticamente la misma, pues los padres de ellos han reiterado la preocupación en la estabilidad emocional y de salud de ellos.
Ya estos jóvenes atraviesan el proceso de juicio continuado, pero en la cuarta audiencia que le realizaron la semana pasada tampoco hubo buenas noticias de libertad.
Sobre la dama recluida en Nirgua es poco lo que se sabe, lo último que se conoció es que los parientes estaban preocupados porque sufre de asma y, presuntamente, toda esta situación le había afectado.
Parientes del grupo de yaracuyanos presos describen que han vivido una pesadilla durante cuatro meses, mantuvieron la esperanza de ver a sus parientes en casa antes que culminara el año, «pero no hay noticias esperanzadoras, no hay pronunciamiento a favor nuestro, pareciera que estamos en una cueva y nadie nos escucha», consideraron.
Vale mencionar que aunque algunos parientes se han atrevido a dar la cara ante las cámaras de los medios de comunicación, hay otro grupo que todavía tiene miedo de hablar y revelar su identidad, es por esta razón que en este reporte no se indica el nombre de ninguno de los que aportaron información sobre la actual situación.
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