La tendencia «todo a mil» se vuelve a sentir en el comercio local de Yaracuy, un fenómeno que muestra la depreciación del bolívar y el alto costo de la vida.
Esta modalidad no se basa en ofertas puntuales, varios productos de la cesta básica y de consumo masivo tienen este precio o están muy cercanos. Incluso, la cifra se ha convertido en el umbral recurrente de cualquier transacción financiera que suele realizar el ciudadano.
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Hasta hace poco, Bs. 1.000 era un monto con peso y que te permitía cubrir varias necesidades; ahora al cambio oficial del Banco Central de Venezuela, estamos hablando de poco menos de $5.
¿Qué se compra con Bs. 1000?
Desde artículos de limpieza hasta diversos alimentos de primera necesidad rondan en torno a los mil bolívares, lo que viene marcando un nuevo estándar de precios mínimos en el comercio local.
Un champú, desodorante, desinfectante de litro, paquete de pañales, un paquete de leche completa de 400 gramos rondan y superan los Bs. 1.000.
Incluso, productos esenciales como la carne y el queso hace rato que pasaron este piso.
Consumidores sienten que ahora Bs. 1.000 se van muy rápido en cualquier tipo de compra y lo peor del caso es que muchos no perciben ese ingreso de manera quincenal.
«Me pagaron mil bolívares del segundo mes de aguinaldo y se me fue todo en verduras y hortalizas. Metí para ensaladas y preparar las carnes», lamentó Samuel Guerra, docente jubilado.
«Cualquier tontería ahora son mil bolívares y se vuelve nada si te metes en un abasto, con eso compras dos o tres cositas y a veces quedas corto», comentó otro de los consultados.
Algunos consultados también dijeron que este monto está siendo usado como techo para establecer el pago de algún servicio o labor.
«Tenemos un obrero que nos realiza labores en la casa y a casi todo le tiene como precio Bs. 1.000, para no hablar de dólares, establece ese monto», dijo otro de los ciudadanos entrevistados.
El tema de los altos precios y bajos salarios mantienen preocupados al colectivo, resolver lo que hay que llevar a la mesa y hacerle frente a la economía es una labor titánica.




