
Este domingo 5 de octubre, el gremio de enfermería en Aroa, municipio Bolívar (Yaracuy), pidió justicia por la muerte de su compañera Roxana Parra (25), quien falleció este fin de semana, tras sufrir quemaduras en más del 40 % de su cuerpo, esto luego de que, presuntamente, su pareja sentimental, un hombre de 50 años, la rociara con gasolina en medio de una discusión, porque ella quería terminar la relación.
Antes de la sepultura, las enfermeras rindieron un sentido homenaje a Parra en el Hospital José Elías Landínez de Aroa, lugar donde laboraba Parra. El cuerpo de la infortunada fue trasladado al centro asistencia, en una parada antes del sepelio realizado este domingo en el cementerio de la capital del municipio Bolívar.
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Sus colegas elevaron su voz a través de carteles y pancartas en los que se podían leer frases como: “El gremio de enfermería Aroa pide justicia por Roxana”, “El machismo mata”, “Vivas nos queremos”, “Ni una menos”, “No es cosa de pareja, es violencia machista”, entre otras. También elevaron globos blancos.
Parra murió el viernes 3 de octubre en la Unidad de Caumatología del Hospital Central Universitario Dr. Antonio María Pineda (Barquisimeto, estado lara), donde fue trasladada debido a las lesiones en gran parte de su cuerpo. Estuvo durante cinco días luchando por su vida, pero lamentablemente no resistió.

Este hecho ocurrió el domingo 28 de septiembre en el sector Tamarindo, en Aroa, espacio donde convivía la pareja. Según la versión contada por la misma joven, quien grabó un video cuando estaba siendo trasladada hasta el hospital, la discusión se desató porque ella quería ponerle fin a la relación. En medio de la pelea, él la amenazó con un cuchillo y la roció con gasolina.
Parra también dijo que al sufrir las quemaduras salió de la casa, se tiró al piso, y luego corrió hasta la carretera, donde un mototaxista la auxilió y la llevó hasta el hospital de Aroa. De allí, fue trasladada hasta el de San Felipe y posteriormente al de Barquisimeto.

El inmueble también entró en llamas; sin embargo, funcionarios del Cuerpo de Bomberos pudieron controlar el fuego.
La pareja de la joven fue detenida por funcionarios de la policía y durante la audiencia de presentación le fue ratificada la privativa de libertad y fue acusado de femicidio agravado en grado de frustración. Para ese momento, la joven estaba viva.
Expertos en materia de derecho explicaron que, tras el fallecimiento de la joven, la fiscalía pudiera anular la audiencia de presentación anterior o volver a presentar al sujeto antes de la acusación.
Parra era enfermera de profesión y madre de un pequeño de siete años, quien al momento del suceso estaba junto a su papá, una expareja de la joven.
