La ciudad de Gaza es un bastión político y militar de Hamás y, según Israel, todavía alberga una vasta red de túneles a pesar de múltiples incursiones a lo largo de la guerra.
Israel comenzó a movilizar decenas de miles de reservistas el martes como parte de su plan para ampliar su ofensiva en la ciudad de Gaza, lo que ha provocado oposición interna y condena en el extranjero, según informó Euronews.
El llamado a filas, anunciado el mes pasado, se produce mientras las fuerzas terrestres y aéreas avanzan y persiguen más objetivos en el norte y centro de Gaza, atacando partes de Zeitoun y Shijaiyah, dos barrios occidentales de la ciudad de Gaza en los que las FDI han incursionado repetidamente durante la guerra de 23 meses contra los militantes de Hamas.
Zeitoun, que alguna vez fue el barrio más grande de la ciudad de Gaza, se ha transformado durante el último mes: las calles se han vaciado y los edificios han quedado reducidos a escombros, convirtiéndose en lo que las FDI llamaron la semana pasada una «zona de combate peligrosa».
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La ciudad de Gaza es un bastión político y militar de Hamás y, según Israel, todavía alberga una vasta red de túneles a pesar de los múltiples intentos de desmantelarla durante la guerra.
Es también uno de los últimos refugios en el norte de la Franja, donde se refugian cientos de miles de civiles, enfrentados tanto al peligro del combate como a la hambruna.
Al menos 60.000 reservistas israelíes serán llamados gradualmente al servicio militar, según informaron las Fuerzas de Defensa de Israel el mes pasado. También se extenderá el servicio de otros 20.000 reservistas que ya están en el ejército.
Siguen las críticas
Mientras tanto, las críticas sobre la guerra en Gaza aumentan. Varios movimientos se están organizando para animar a los reservistas a no servir, aunque aún no está claro cuántos rechazarán el último llamado a filas.
Desde que la principal autoridad mundial en materia de crisis alimentaria declaró el mes pasado que la ciudad de Gaza estaba en medio de una hambruna, las muertes relacionadas con la desnutrición han aumentado.
El Ministerio de Salud de Gaza, dirigido por Hamás, dijo el martes que un total de 185 personas murieron de desnutrición en agosto, la cifra más alta en meses.
La guerra comenzó cuando militantes de Hamás atacaron el sur de Israel el 7 de octubre de 2023, matando a unas 1.200 personas, la mayoría de ellas civiles.
