Familiares de los fallecidos en el trágico accidente, ocurrido el domingo #29diciembre que enlutó a varios hogares yaracuyanas, esperaban con tristeza este lunes #30dic la entrega de los cuerpos. En el siniestro fallecieron seis personas y 23 resultaron lesionados.
En la comunidad de Cocorotico, municipio San Felipe, se respiraba un ambiente de consternación por este suceso en el que perdieron la vida dos de sus residentes y varios resultaron lesionados.
En el hogar de la familia Pérez lloraban la partida de Anderson Josué Pérez Torres, de 27 años, quien era el colector de la unidad siniestrada.
En el hogar familiar estaban sus amigos, vecinos y su joven esposa, todos muy afectados por la pérdida del joven trabajador. Hasta cerca del mediodía de este lunes #30dic desconocían los detalles del traslado del cuerpo hasta San Felipe.
En el suceso ocurrido aproximadamente a las 3:30 pm en el kilómetro 128 de la Autopista Regional del Centro, a la altura de San Joaquín en el estado Carabobo, también resultó lesionado Antonio Pérez, conductor de la buseta.
«En Carabobo están varios familiares de Anderson, incluyendo su papá, quienes se están encargado de los detalles legales, pero hasta ahora no nos han dicho nada«, explicó un allegado.
Anderson Pérez, quien era el menor de cuatro hermanos, tenía varios años dedicado a trabajar en el área de transporte y viajaba a Caracas cuando le tocaba el turno a la unidad que era conducida por su padre.
El joven dejó a un niño de nueve años y a una niña de un año.
Andriana Ortiz viajaba con dos tíos
También en Cocorotico, la familia Ortiz seguía sin creer lo ocurrido. En el suceso murió Adriana Yamilet Ortiz, de 44 años, quien venía a pasar el fin de año con su familia en Yaracuy, junto a dos de sus tíos, quienes están en la lista de heridos: Francisco Jiménez y Migdalia Ortiz.
Óscar Suárez, esposo de la infortunada, contó que el domingo #29dic acompañó a Adriana hasta el Terminal de La Bandera en Caracas para despedirse de ella. Apenas se enteró del vuelco de la buseta se trasladó a Carabobo, donde se encontró que su esposa formaba parte de los fallecidos.
Adriana, quien era enfermera, tenía varios años laborando en la ciudad de Caracas en un ente de salud del Estado y tenía varios días de permiso. Visitaba con frecuencia a San Felipe a estar su madre y familiares. Generalmente, prefería viajar en ranchera, pero en esta ocasión prefirió la buseta, debido a que iban tres personas y quería ahorrar en el pasaje.
