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- – Sobre Maduro: Maduro promete corregir lo que el presidente Maduro no ha podido hacer desde 2013. Lo que se repite en la campaña, es una suerte de evasión de responsabilidades y un frenesí por reparar todo, como si de todas las carencias que viven los venezolanos se acabara de enterar. En un momento determinado, Chávez aplicó la estrategia de andar regañando subalternos por la ruina en servicios públicos e infraestructura, insisto, es como fingir que todas las incesantes demandas populares acaban de llegar al Maduro candidato, sin acotar que han sido desatendidas por el Maduro presidente. En las campañas de Chávez 2006 y 2012, encontraremos elementos que hoy se repiten, pero nada en concreto. Esperanza, milagros económicos, dignificación, empoderamiento, justicia social; todos elementos rancios, consignas vacías que no significan nada. Maduro es malo haciendo campaña porque no puede mostrar éxitos en su gestión. Y tampoco echarle la culpa al gobierno anterior…
- – Sobre Edmundo: Y volvemos con la esperanza, con el romanticismo, con la prosa de la libertad, la alegría y el anhelo y todas las palabras que encuadren en un histrionismo propio de las novelas de los 80, donde el bien triunfaba contra el mal. Edmundo González no parece un candidato, porque no se comporta como tal, así que evaluar su plan de gobierno o su campaña es como leer un cuento infantil, donde solo importa el voto y después se verá. Lo de la vianda me pareció un triste show. Anunció que no haría campaña, que la harían por él, que su condición y ritmo de vida no sería alterado por este compromiso. Y quiero subrayar que está en pleno derecho de hacerlo, pero si la oposición quiere tratar esto como un plebiscito (sin valorar lo absurdo de la estrategia), debo recordarles que el tarjetón está compuesto por muchas opciones, no solo de un sí, o un no. Veía unas propagandas en YouTube de la oposición, pero no eran de la oposición, sino de María Corina Machado, quien durante los treinta segundos de la misma, no nombró ni a la tarjeta de la MUD ni a Edmundo González, solo a votar el 28 de julio. ¿Por ella?, ¿Dónde?, ¿Cuándo?
- – El impacto regional: De todos los gobernadores del país, cinco son de oposición y todos los demás del PSUV. Apliquemos la misma ecuación a los alcaldes. Eso habla de una maquinaria que, más allá de la ruptura de los límites morales en el uso de la cosa pública para hacer proselitismo, es y está allí, tiene recursos. Por otra parte, mucho del liderazgo regional de la oposición está dedicado en grado sumo a las redes sociales, porque parecen haberse convencido que la realidad del país y el mundo es X, Instagram o YouTube. Las maquinarias regionales son las que impulsarán, movilizarán y defenderán los votos, y si esa proporción y balance es una completa distorsión, no importa cuánta percepción o deseo se tenga de un resultado, eso se materializa en la práctica y no en las palabras y los posts. Que si los testigos, que si las listas, que si el dudoso 1x10x7, o que si el comandito surrealista, serán una lógica comprobación el próximo domingo 28. ¿La reedición del 2015? No es así. No olvidemos que cada candidato impulsaba su opción de forma local. Fue una campaña centralizada en la consigna, pero no en la práctica.