Los 14 municipios del estado Yaracuy han sido escenarios de homicidios, siendo los más violentos Peña, Veroes, Nirgua, San Felipe y Bruzual tanto en el 2023, como en lo que ha transcurrido del presente año.
A pesar de ello, en el primer semestre de 2024 se han registrado 22 homicidios, lo que significa una disminución de 26,6 % de homicidios, esto en comparación con el 2023, cuando desde enero hasta junio ocurrieron 30 asesinatos.
Expertos en el área de inteligencia de la Policía sostienen que este año han mejorado las estrategias de seguridad, por lo que han obtenido buenos resultados, pues en 2023, aunque hubo crímenes cometidos por parte de delincuentes, se cuentan los jóvenes (hombre y mujeres) que fueron ultimados en presuntos enfrentamientos policiales.
Esta situación ha sido repetitiva en el año que está en curso, prueba de ellos son los 22 homicidios ocurridos por diversas razones.
Lo cierto es que la venganza se convirtió en el móvil más común en ambos semestres de 2023 y 2024, por problemas de droga, dinero u otros conflictos.
Otro factor que es comparativo es que en los dos periodos mencionados, los organismos de seguridad han batallado con bandas organizadas que nacieron y comenzaron a operar con contundencia en el estado.
Se trata de las organizaciones criminales “El Mimosín”, la cual estaba radicada en el municipio Veroes, y “El Alacrán”, que delinquía entre las jurisdicciones de Bolívar y Manuel Monge.
El último grupo mencionado se desató hace menos de tres meses, el cabecilla fue detenido cuando pretendía huir a Colombia, y el líder de la banda delictiva “El Mimosín” fue ultimado por funcionarios policiales hace meses en el municipio Bruzual.
En el 2023, según las cifras que registra Yaracuy al Día, marzo y mayo fueron los meses más violentos con siete casos cada uno, seguidos de enero y febrero cuando se registraron cinco hechos de manera individual, mientras que abril y junio tienen tres homicidios por mes, esto para un total de 30 asesinatos.
En lo que respecta al 2024, en abril se registraron seis homicidios, en junio cinco, en mayo cuatro, en enero tres, en febrero y marzo dos cada uno.
Un importante porcentaje de las víctimas fueron jóvenes que no superaban los 25 años, la mayoría tenía antecedentes policiales y estaban implicados en hechos delictivos.
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