Los presidentes de Brasil y México Luiz Inácio Lula da Silva y Claudia Sheinbaum, respectivamente, ofrecieron este jueves 18 de diciembre, por separado, servir como mediadores para evitar que el conflicto este Estados Unidos y Venezuela siga escalando. Lula dijo que su propuesta tenía como objetivo impedir que haya «una guerra» en Sudamérica, que debe mantenerse como una zona de paz.
«Yo hago política buscando soluciones para los problemas», dijo Lula, que confirmó que, en recientes conversaciones con los presidentes de EE UU Donald Trump y de Venezuela Nicolás Maduro, pidió saber «cómo se puede contribuir para una solución pacífica». El mandatario brasileño conversó por separado con ambos a comienzos de este mes, y a ambos les dijo que «las cosas no se resuelven con tiros», sino con diálogo político.
Leer también: La Asamblea Nacional aprobó acuerdo en repudio a las amenazas de Estados Unidos
«Le dije a Trump que esta es una región de paz, que debe seguir así», declaró, para ofrecerse después para «conversar con Venezuela y con otros países para evitar un conflicto armado en nuestra América del Sur».
El mandatario agregó que no sabe qué desata la tensión, «si es por el petróleo, por los minerales críticos, las tierras raras» o para «derribar a Maduro», pero que lo importante es impedir un aumento de las hostilidades.
«A favor de solución pacífica»
Por su parte, la presidenta de México dijo estar dispuesta a convocar a países americanos y de otros continentes para buscar una salida «pacífica” a cualquier conflicto en Venezuela y la región. En su conferencia matutina, Sheinbaum sostuvo que la postura mexicana responde a «una convicción» y a la Constitución, y planteó que debería ser compartida por los países sudamericanos, aun cuando existan diferencias políticas entre gobiernos.
Leer también: Putin llama «cerditos» a los países europeos y despliega nuevas armas nucleares
«Nosotros no estamos de acuerdo con intervenciones (…) y estamos a favor de la solución pacífica de los conflictos», señaló. «Si hay un conflicto, hay mecanismos establecidos por Naciones Unidas para que haya una solución pacífica a cualquier disputa. Y tienen que participar todas las partes”, afirmó, al recalcar que esa ha sido «la posición de México desde hace mucho tiempo».
De cualquier modo, Sheinbaum reconoció que, hasta ahora, su Gobierno no ha recibido peticiones para encabezar gestiones multilaterales, ni tampoco ha establecido comunicación con algún otro Gobierno con este fin.




