
El Gobierno de Venezuela rechazó categóricamente la reciente alerta de viaje emitida por el Departamento de Estado de los Estados Unidos (EE UU), calificándola como un acto hostil y parte de una campaña de agresión sistemática contra el país.
Lea también: Ante «riesgo extremo» EE UU reitera llamado a sus ciudadanos para que no viajen a Venezuela
A través de un comunicado oficial, Venezuela denunció que mientras EE UU emite advertencias sobre la seguridad en el país, mantiene prácticas de persecución contra migrantes, incluyendo el caso de Maikelys Antonella Espinoza Bernal, una niña venezolana retenida en la frontera sur sin justificación ni respuesta oficial. Según el pronunciamiento, este tipo de acciones evidencian el uso de ciudadanos como rehenes políticos.
El comunicado también cuestiona» «la autoridad moral de EE UU en materia de derechos humanos, recordando casos de niños en jaulas, separaciones familiares, deportaciones arbitrarias y condiciones inhumanas en centros de detención».
Además, denuncia «la existencia de leyes racistas, brutalidad policial y el trato degradante hacia trabajadores venezolanos, citando el caso de ciudadanos secuestrados en El Salvador».
A continuación el comunicado:
