El Papa León III, el 96 papa de la Iglesia católica entre 795 y 816 fue muy amigo de Carlomagno, rey del Sacro Imperio Romano desde 800 hasta su muerte en el 814; recopiló de lo más profundo de la biblioteca del Vaticano, una serie de oraciones que le fueron entregadas para protegerlo en su reinado. No en vano, en su reinado Carlomagno consiguió reunir, a los pies de su trono, la mayor entidad territorial vista en Occidente desde la caída de Roma tres siglos antes.
Su reinado supuso un renacimiento cultural en Europa. La economía también vivió un momento de relativa opulencia; hubo mucha paz interna y aseguró un imperio que rememoraba la grandeza de los césares romanos.
En uno de los pergaminos entregados aparece un texto que contiene, a manera de hechizo, los caracteres A B G D K E como preámbulo de una oración para que Carlomagno saliera bien librado de las batallas, para que fuera protegido “de enemigos, mal tiempo, espadas, pociones, serpientes y venenos”. Estos caracteres son señalados en el Enchiridion, en la nota o Bref de Carlomagno, ambos escritos por el Papa León III.
San Columbano, monje misionero, escribió las “Notas de San Columbano” donde señala haber recibido de Dios varios encantos latinos, entre ellos A B G D K E.
Cuando San Columbano partió a la guerra, el sacerdote experimentó con un criminal para probar las virtudes del hechizo, y el villano salió ileso de todas las pruebas que le impusieron. Tanto en los escritos por el Papa León III, como en las notas de San Columbano, se señala que el hechizo ofrece protección contra todo mal.
Para no ser del todo incrédulo, algo trae el hechizo A B G D K E, ya que es mencionado en los preámbulos de los escritos, los cuales, por cierto, son señalados por autores en sus libros como Galdrakver, folio 9r°–10v° que es un pequeño libro de magia de 1670, escrito completamente a mano, cuya autoría es atribuida a Hannes Finnson, que nació el 8 de mayo de 1739 y murió el 4 de agosto de 1796. También, fue obispo de Skálholt en el sur de Islandia.
En Aymar Alphonse, en las páginas 331-32,335,339, Romano, “Guaritrici tradizionali nel Bresciano” Garantías tradicionales en Bresciano, también aparece el hechizo, igual lo encontramos Ignaz Vincenz Zingerle en su libro Sitten, Bräuche und Meinungen, (Usos, costumbres y opiniones del pueblo tirolés (2ª ed. 1871)) 67, no. 573.
De acuerdo a ciertas apreciaciones, es posible que la petición por la solución al problema se dirija a los nombres de Dios Adonay, Binah, Hey pronunciado como Gey, Dominus, Kether y Elohim, cuyas iniciales son precisamente las que sirven de preámbulo al pedimento ya que, de esa manera, también se estilan las realizaciones de algunos hechizos.
